¿Te sientes sin energía, sin ilusión o atrapado en una tristeza persistente? En Clínica Eos, sabemos lo difícil que puede ser atravesar una etapa de depresión. Nuestro tratamiento psicológico para la depresión está diseñado para ayudarte a recuperar el equilibrio emocional y retomar tu vida con claridad y confianza.
¿En qué consiste nuestro tratamiento para la depresión?
En Clínica Eos ofrecemos un enfoque basado en la Terapia Cognitivo-Conductual (TCC), respaldado por la evidencia científica y adaptado a tus necesidades personales. Nuestra psicóloga Andrea Beseler te acompañará en un proceso terapéutico centrado en identificar y transformar los pensamientos negativos, fomentar habilidades de afrontamiento emocional y restaurar tu bienestar general.
Nuestros objetivos principales son:
- Disminuir los síntomas de tristeza, apatía y desesperanza.
- Ayudarte a recuperar la motivación y el placer por tus actividades.
- Reestructurar pensamientos automáticos negativos.
- Reforzar tu autoestima y confianza personal.
¿Por qué elegir nuestro tratamiento psicológico?
En Clínica Eos, te ofrecemos una atención cálida y profesional, sin juicios, centrada en ayudarte a avanzar a tu ritmo. No trabajamos con fármacos, sino con herramientas terapéuticas sólidas que te permitirán entender lo que sientes, gestionar tus emociones y crear nuevas formas de relacionarte contigo mismo y con los demás.
¿Necesitas también apoyo médico? En nuestra clínica colaboramos estrechamente con el Dr. José Luis García Belenguer para abordar la depresión desde una perspectiva multidisciplinar si así lo necesitas.
Datos relevantes sobre la depresión
La terapia cognitivo-conductual (TCC) es más eficaz a largo plazo que los antidepresivos:
Un metaanálisis con más de 52.000 pacientes muestra que la TCC es tan eficaz como los antidepresivos a corto plazo, pero superior a estos a los 6-12 meses tras finalizar la intervención.
La combinación de psicoterapia y medicación reduce recaídas
En un estudio reciente, pacientes tratados con una combinación de farmacoterapia y psicoterapia presentaron menos recaídas en el seguimiento a 12 meses, en comparación con quienes solo recibieron uno de los tratamientos.
La depresión afecta a 280 millones de personas en el mundo
- Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente 280 millones de personas en el mundo sufren depresión, lo que representa alrededor del 5% de la población adulta y el 5,7% de los adultos mayores de 60 años
Cómo empezar tu tratamiento
Puedes reservar una cita con nuestra psicóloga Andrea Beseler desde nuestra página de contacto. Te acompañaremos con respeto, cercanía y compromiso en cada paso del proceso terapéutico.
Da el primer paso hacia tu bienestar emocional
Recuperar el equilibrio es posible. Da el primer paso con el apoyo adecuado. Contáctanos hoy y empieza tu tratamiento psicológico para la depresión con Andrea Beseler.
Preguntas frecuentes sobre el tratamiento para depresión
Utilizamos la Terapia Cognitivo-Conductual (TCC), eficaz y validada científicamente.
En principio, no. El enfoque es psicológico. Si se considera necesario el apoyo médico, se te orientará adecuadamente.
Cada persona es distinta. La duración dependerá de tus objetivos y evolución.
En nuestra clínica en Plaza Antiga Morería 3, Sagunto.
La depresión puede tratarse eficazmente en la mayoría de los casos. Algunas personas experimentan una recuperación completa, mientras que otras pueden necesitar apoyo continuo para mantener el bienestar emocional. El tratamiento psicológico, como la terapia cognitivo-conductual, es clave tanto para la mejora como para el control a largo plazo.
Aunque algunas personas pueden notar mejoras con el tiempo, lo más recomendable es buscar ayuda profesional. Salir de la depresión sin apoyo puede ser difícil y arriesgado. La terapia psicológica ofrece herramientas prácticas y efectivas para afrontar y superar los síntomas de forma segura y duradera.
La depresión puede manifestarse de muchas formas, pero algunos signos comunes son la tristeza persistente, falta de energía, pérdida de interés en actividades cotidianas, dificultad para concentrarse, alteraciones del sueño y del apetito, y pensamientos negativos recurrentes. Cada persona puede experimentar síntomas diferentes.